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[PDF] El increíble poder de las emociones

En la creación de todo lo que existe, el pensamiento siempre es lo primero. Todo lo que ves a tu alrededor, una vez fue un pensamiento o idea; un concepto vibratorio que maduró hasta convertirse en lo que denominas realidad física.

Cuando te encuentras en la máxima expresión de cualquier creación; no puedes retroceder lo bastante, para comprender sus orígenes.

Todo lo que existe, en lo que ves como real, o forma manifestada; una vez fue una idea, que se pensó durante un período de tiempo, continuado y que mediante la Ley de la Atracción; alcanzó la madurez que ahora tiene. No existe nada que escape a este proceso de creación.

Este planeta, fue concebido desde el plano “no físico”, mucho antes de que los seres humanos caminaran sobre él; y mientras ese eje “no físico”, que los humanos llaman Fuente; se proyectaba sobre esa idea, se creó esta maravillosa realidad tiempo-espacio de Primera Línea.

Primero está el pensamiento, y cuanto más se piensa en cualquier objeto, el pensamiento comienza a adoptar forma; hasta que se manifiesta en lo que los seres humanos denominamos, «realidad». 

Por lo tanto, de forma similar a la creación de este planeta, mientras ocupan estos cuerpos físicos, como expresiones manifestadas de lo que denominamos Fuente; a través de vuestros pensamientos continuáis creando vuestro planeta y la vida que hay en él.

Tienes que ser la versión expandida de tu vida

Cuando sabes lo que no quieres, tienes una idea más clara de lo que quieres, y de ese contraste que experimentas nace una idea perfeccionada. 

Cuando observamos diariamente, y momento a momento los detalles de la experiencia de tu vida, proyectas de forma constante un aluvión de ofrendas vibratorias.

Tus sueños, esperanzas, intenciones e ideas para mejorar están almacenados en una especie de Depósito Vibratorio; y esa cuenta está reservada, es engrosada y cuidada para ti, a la espera de que retires lo que desees cuando te plazca. 

No sólo la tienes reservada, sino que esa parte superior tuya ya se ha fusionado con ella; y está siempre incitando a tu parte física hacia ella. 

Lo que sucede es que tu parte física está siendo atraída hacia tu Yo “no físico», para la compleción de la idea que has generado; y en su forma más pura y fluida, esa llamada la sientes como pasión o entusiasmo.

Cuando sientes amor o felicidad, o cualquier emoción positiva, literalmente estás siendo la versión expandida que la vida ha hecho que fueras. 

Cuando tienes miedo, ira o desesperación o cualquier emoción negativa, en ese momento, en virtud de aquello a lo que le estés prestando tu atención; no estás permitiéndote ser esa nueva versión expandida, no te estás permitiendo seguir siendo aquello en lo que te habías convertido.

Eres un Ser Vibratorio

Percibes tu entorno físico actual gracias a tus sentidos. Esta interpretación de tu entorno se produce de un modo tan natural sin necesidad de prestar atención deliberadamente que la mayoría de nuestros amigos físicos no son conscientes de que lo que ven, oyen, huelen, saborean o tocan es una interpretación de la vibración.

Cuando miras la televisión, sabes que las personas y lugares que estás viendo no son versiones en miniatura de una vida que tiene lugar dentro de esa pequeña caja o de esa delgada pantalla que estás mirando. 

Entiendes que de algún modo ese aparato está recibiendo señales y las traduce en imágenes coherentes que se proyectan en el monitor para complacer tu vista. 

Aunque las analogías nunca sean perfectas, la idea que queremos que tengas en cuenta es que eres el receptor de señales vibratorias que estás traduciendo a tu realidad mediante tus sentidos físicos. Y al interactuar con el resto de Seres Vibratorios, crean todos juntos una realidad extraordinaria.

No necesitaste que ningún otro amigo físico más sabio te enseñara a ver con tus ojos. La audición, el olfato, el sabor y el tacto también se produjeron de un modo tan natural que no necesitas ninguna explicación respecto a cómo utilizarlos. 

Es decir, naciste en un cuerpo físico que contenía en su interior las células del conocimiento para traducir la vibración en una experiencia de vida significativa.

Tienes un sexto sentido 

Aparte de los cinco sentidos físicos que conoces muy bien, hay otro del que no eres tan consciente: el sentido de la emoción. Al igual que con tus otros cinco sentidos, ese sexto sentido, activo desde el día en que naciste, no requiere ningún entrenamiento por tu parte para comprender que existe. 

Al igual que nadie te enseñó a oír, oler, saborear o tocar, no necesitas que nadie te enseñe que estás sintiendo emociones. De hecho, tu conciencia emocional se manifiesta por tus conversaciones cuando defines tu experiencia de la vida. 

Normalmente explicas cómo te «sientes» respecto a esto o aquello: «Me han herido los sentimientos», «Me siento feliz», «Me siento solo» o «Me siento culpable». 

Las emociones desempeñan un gran papel en la experiencia de tu vida y de las personas que conoces, pero pocas son verdaderamente conscientes de su sorprendente poder y valor. 

Nuestra intención con estas palabras es ayudarte a entender tus emociones de una manera más consciente: su existencia, lo que significan, y lo más importante, cómo utilizar tu conocimiento sobre ellas con eficacia. Queremos explicarte que tus emociones son literalmente el indicativo de que tu yo se está fusionando con tu Yo.

Regresa a la totalidad 

Antes estabas concentrado en lo No-Físico y sigues estándolo. Proyectaste una parte de tu Conciencia No-Física a tu cuerpo físico actual y naciste en este cuerpo. 

Percibes tu entorno y lanzas continuamente cohetes de deseo a través de tus sentidos físicos. Esa parte No-Física de ti que sigue concentrada en lo No-Físico ve tu nuevo deseo y le presta toda su atención hasta fusionarse con él y convertirse en el equivalente vibratorio de esta nueva versión expandida de ti mismo. 

Tu experiencia en el plano físico propicia tu expansión incesante. En cada encuentro con otras personas, con las cosas que lees, ves y experimentas, generas nuevos cohetes de deseo. 

Si alguien se muestra desagradable contigo, deseas que otras personas sean amables. Cuando no te entienden, deseas ser entendido. Cuando no tienes suficiente dinero, bienestar o amistad, deseas más de esas cosas. 

La vida hace que te expandas constantemente. En otras palabras, un yo nuevo y mejorado se encuentra en un incesante estado de llegar a ser, puesto que la parte No-Física de ti siempre está en proceso de convertirse en aquello que has pedido.

Tus emociones son indicadores exactos

Cuando la percepción de tu vida actual te genera el sentimiento de que no tienes bastante de alguna cosa como dinero, tiempo, claridad o energía, tu deseo evoluciona. 

Siempre que eres consciente de que te falta algo, tienes más claro lo que deseas. En otras palabras, cuando estás enfermo, aumenta tu deseo de bienestar. 

Con la evolución constante de tus deseos a lo largo del día, esa parte No-Física de ti también evoluciona, porque en el mismo momento en que generas ideas y deseos nuevos, fluye con cada uno de ellos. 

Si estuvieras tan seguro de quién eres cómo está esa parte tuya interior, también podrías centrar tu atención unidireccionalmente hacia las ideas nuevas, y si lo hicieras, sentirías entusiasmo por vivir, claridad mental y una vitalidad física indescriptible. 

Es decir, si pudieras mantener el contacto con tu Yo, la euforia de esa conexión sería exquisita. Y a la inversa, cuando no te permites mantener el contacto con quien te has convertido, sientes la incomodidad de esa resistencia. 

Las emociones que sientes en cualquier momento de tu vida son los indicadores de la relación vibratoria entre tu yo y tú Yo; tus emociones te están diciendo si tus pensamientos actuales y su vibración están en armonía con la vibración de tu Fuente evolucionada. 

Cuando coinciden las señales o se acercan a la coincidencia, te sientes de maravilla. Cuando no coinciden, no te sientes tan bien. De modo que ser consciente de tus emociones y de su significado es esencial para tu evolución consciente. Con palabras muy sencillas y directas: si deseas vivir la felicidad para la que has venido a este planeta, has de hallar la forma de ser aquello que te indica la vida.

Nunca dejas de expandirte

Si al observar tu vida te das cuenta de que no tienes suficiente dinero para hacer algunas de las cosas que te gustarían, aumenta tu deseo de tener más dinero, y tu Depósito Vibratorio se expandirá para incluir ese deseo. 

Todo lo que te sucede a lo largo del día hace que seas más consciente de que quieres o necesitas más dinero provoca modificaciones adicionales de tu deseo de abundancia económica. 

Si al observar tu vida te das cuenta de que tu cuerpo no tiene el aspecto deseado o no se siente como quisieras, aumenta tu deseo de mejorar tu condición física, y tu Depósito Vibratorio se expandirá para incluir ese deseo. 

Si al observar tu interacción con otras personas en tu puesto de trabajo te das cuenta de que no te valoran, tu deseo de ser valorado aumenta. 

Cuando te aburre lo que haces, tu deseo de hacer cosas más estimulantes aumenta. Si algún compañero de trabajo le ascienden o le dan un aumento, crece tu deseo de reconocimiento. 

Cuando no tienes una relación importante, tu deseo de tenerla aumenta. Si tu relación actual te causa estrés, tu deseo de tener una relación más compatible aumenta. 

En todos tus momentos de vigilia utilizas los datos que conforman los detalles de tu vida a fin de expandirte, y esta expansión es constante. 

Con todos los detalles que vas recolectando emanas peticiones vibratorias de mejora, y esa parte Expandida de ti se convierte en la versión expandida que ha solicitado tu vida.

Fragmentos del libro, El poder de las emociones

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