
Dado que sólo unos pocos parecen poseer, la capacidad de ver y dibujar; muchas veces se tiende a considerar a los artistas, como personas con un raro don divino. Para mucha gente, se trata de un talento misterioso y que está más allá de la comprensión humana.
Si bien esta actitud, permite que la gente aprecie a los artistas, y admire su obra; no estimula a intentar aprender a dibujar, y tampoco ayuda a los maestros a explicar a alumnos el proceso.
De hecho, mucha gente considera que no deben iniciar un curso de dibujo precisamente porque no saben dibujar. Es como decidir que no vale la pena recibir clases de francés, porque no se sabe hablar francés; o que no se debe seguir un curso de carpintería, porque uno es incapaz de construir una casa desde antes.
El cerebro humano cumple el papel de conductor del organismo, todas las funciones orgánicas están reguladas por el cerebro; existe un flujo permanente de información entre los órganos y el cerebro, es donde generamos nuestras emociones y sentimientos.
El cerebro consta de dos mitades, el hemisferio derecho y el hemisferio izquierdo. Los dos hemisferios están conectados entre sí por una estructura llamada cuerpo calloso, que consta de millones de fibras nerviosas que recorren el cerebro.
La parte de la derecha se ocupa de las expresiones no verbales. Se han realizado varios estudios, que pueden indicar que la conciencia espacial; el comportamiento emocional, la capacidad de controlar los aspectos no verbales de la comunicación; la intuición, la capacidad de reconocer y recordar caras, voces y melodías. El cerebro derecho piensa y recuerda en imágenes.
Diversos estudios han demostrado, que las personas en las que su hemisferio dominante es el derecho, estudian, piensan; recuerdan y aprenden en imágenes, como si se tratara de una película sin sonido. Estas personas son muy creativas y tienen muy desarrollada la imaginación.
